Desde el frente

Zona de Tolerancia


Por Rodrigo Vidal

En los últimos cinco años de la primera década del siglo XXI, las agresiones contra periodistas en México incrementó y de 21 asesinatos que ocurrieron entre los años 2000 y 2005, de 2006 a 2010 aumentó a 74, con 53 homicidios en ese período.

A partir de 2006 comenzaron a registrarse desapariciones de periodistas que en total hasta ahora suman 11. Ante este panorama la Comisión Nacional de Derechos Humanos hace un señalamiento a quienes “desde los puestos de responsabilidad pública no aceptan el escrutinio periodístico sobre su desempeño, pero también los que, dedicados a actividades ilícitas, pretenden acallar la posibilidad de verse descubiertos por la opinión pública”.

Y es que de acuerdo con un reporte de la CNDH, “las autoridades mayormente señaladas en las quejas como presuntas responsables de violaciones a derechos fundamentales de los periodistas son la Procuraduría General de la República y la Secretaría de Seguridad Pública federal”.

Recientemente la Secretaría de la Defensa Nacional publicó un comunicado a modo de disculpa pública por las agresiones que elementos del Ejército Mexicano hicieron a un grupo de periodistas en Tamaulipas.

En su espacio en la red social Facebook, una persona que se identificó como militar criticó la labor de los periodistas y propuso fusilar a aquellos que han hecho críticas sobre la actuación del Ejército en la lucha contra el crimen organizado. No tuvo quien lo secundara en sus comentarios.

Situaciones como esta son una muestra de lo que refiere la CNDH al mencionar que poco aceptan el escrutinio periodístico quienes se desempeñan en la función pública, desde el Presidente de la República, gobernadores hasta soldados.

La CNDH insiste que el Estado mexicano debe erradicar la impunidad de quienes atentan contra los que ejercemos el periodismo en este país, “lograrlo desalentará las agresiones contra periodistas y abrirá espacios para contar con una sociedad mejor informada, más libre, participativa y democrática”.

Pero como este llamado no es suficiente, surgió una iniciativa interesante por parte de la Red Internacional de Periodistas con Visión de Género (RIPVG), que lanzó una campaña mundial de “tarjetas postales de denuncia”, que serán enviadas a Felipe Calderón en las que se evidencian los numerosos asesinatos de periodistas que aún están impunes.

Mediante un comunicado, la RIPVG, integrada por periodistas de 35 países, informó que la organización Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC), tiene documentados de 2005 a junio de este año, 23 casos de mujeres periodistas agredidas, de los cuales 3 fueron asesinatos.

Tan sólo en 2009 en México ocurrieron 144 agresiones contra la libertad de expresión; en 27 casos se encontraron involucradas mujeres periodistas, 20 reporteras, 1 camarógrafa, 1 fotógrafa, 3 comunicadoras de radio, 1 de radio comunitaria y 1 portavoz, según información del Centro de Periodismo y Ética Pública (CEPET).

Y todo en un contexto de total impunidad y sin una señal que haga pensar que las cosas puedan cambiar para los comunicadores. Comentarios, quejas y sugerencias, envíelos y síganos en Twitter: @ZonaDtolerancia.